Vaya mes de Julio movidito. Es verdad que estamos los tres de vacaciones y que tenemos todo el tiempo del mundo, pero también es verdad que apenas hemos parado por casa. Hemos estado en Cantabria de viaje y luego en el pueblo de los yayos. Incluso hemos ido a Soria. Y no siempre es posible tener el ordenador o una red wifi para conectarse.
Este verano nos hemos planateado así, sin trabajar ninguno de los dos y a disfrutar de la niña. Hemos ido a la playa, visitado exposiciones, dormido en hoteles, comido en el campo, paseado ciudades, bañado en el mar, montado en quad y merendado en el claustro de un monasterio. Hemos vomitado en la réplica de la cueva de Altamira y gritado en Las Edades del Hombre. Hemos dormido en la casa rural de los abuelos y en otra casa rural que no sabemos de quién era.
Nos lo hemos pasado muy bien, y todavía nos queda más de un mes por delante.
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